Ford Mustang GTD mejora su récord en Nürburgring

El superdeportivo estadounidense bajó su tiempo en 5,5 segundos y se posiciona entre los más rápidos del circuito

El Ford Mustang GTD continúa escribiendo su historia como el deportivo más radical jamás producido por la marca del óvalo azul. Recientemente, logró superar su propio récord en Nürburgring, marcando un tiempo oficial de 6 minutos y 52,072 segundos, lo que le permitió escalar al cuarto puesto del ranking de autos de producción más rápidos en el trazado alemán.

Esta hazaña representa una mejora de 5,5 segundos respecto a su vuelta anterior, y lo convierte en el primer modelo de un fabricante estadounidense en lograr tiempos por debajo de los siete minutos en este icónico circuito. La hazaña se traduce, en términos prácticos, en una ventaja de más de 1.290 metros tras una vuelta completa de 20,7 km.

Para alcanzar este nuevo objetivo, el equipo de Ford realizó una revisión exhaustiva de la telemetría obtenida en la primera prueba. Luego de analizar segundo a segundo cada curva y tramo del circuito, se implementaron mejoras clave en varios componentes del vehículo, tanto en simulador como en pista.

Las actualizaciones incluyen un chasis con mayor rigidez torsional, una nueva calibración del sistema de suspensión y mejoras en el sistema aerodinámico para aumentar la carga aerodinámica (downforce). También se optimizó la gestión del tren motriz, el comportamiento del sistema ABS y el control de tracción, junto con un nuevo desarrollo de amortiguadores con válvula activa.

El piloto encargado de esta vuelta fue Dirk Müller, de Multimatic Motorsports, quien lideró las pruebas junto al equipo de desarrollo de Ford. Tras varias sesiones de simulación y condiciones climáticas favorables, se concretó este segundo intento exitoso que demuestra la evolución del Mustang GTD.

“Reducir 5,5 segundos en Nürburgring no es solo una mejora, es una declaración de capacidades. Refleja el compromiso de Ford con la excelencia en rendimiento, fiabilidad y precisión técnica. El Mustang GTD no es solo un homenaje a la competición, es una muestra de lo que puede lograr la ingeniería enfocada en la pista”, explicó Greg Goodall, ingeniero jefe del proyecto.

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