Ford Performance vuelve a deslumbrar en el escenario de la Pikes Peak International Hill Climb con una propuesta radical: el Super Mustang Mach-E, un prototipo eléctrico de alto rendimiento diseñado para superar los 20 km de exigente ascenso en Colorado Springs. Este modelo no solo destaca por su potencia de 1.400 caballos, sino por su avanzada ingeniería enfocada en eficiencia, agilidad y aerodinámica.
La conducción estará a cargo de Romain Dumas, poseedor del récord absoluto en Pikes Peak, quien se embarca en su décima participación en esta icónica competencia y la tercera junto a Ford. El piloto francés cuenta con una sólida trayectoria en la montaña y ha sido una pieza clave en los más recientes logros de Ford en este tipo de eventos.
Desarrollado en colaboración con STARD Advanced Research and Development, el Super Mustang Mach-E ha sido optimizado frente al F-150 Lightning SuperTruck del 2024. Su diseño incluye una distribución de peso más equilibrada, mayor regeneración de energía, menor masa total y mejor maniobrabilidad, elementos clave para enfrentar las 156 curvas que llevan hasta los 4.200 metros de altitud.
El prototipo incorpora tres motores eléctricos STARD UHP de seis fases, una batería de 50 kWh con celdas NMC de ultra alto rendimiento y un sistema de frenos de carbono, todo ello operando a 799 voltios. Esta arquitectura permite una recuperación de energía de 710 kW y una carga aerodinámica de hasta 3.200 kg a 250 km/h, cifras que lo posicionan como uno de los vehículos eléctricos más sofisticados creados por Ford.
La experiencia en la montaña no solo tiene un fin competitivo. Ford asegura que las lecciones aprendidas en Pikes Peak impactan directamente en el desarrollo de su próxima generación de vehículos eléctricos de producción, especialmente en lo relacionado con química de baterías, gestión térmica y calibración de frenos regenerativos.
Con una tradición que se remonta a 1916, cuando un Modelo T conquistó por primera vez la montaña, Ford reafirma su apuesta por la innovación eléctrica en uno de los entornos más exigentes del automovilismo. El número 310 del prototipo rinde homenaje a la trayectoria de Dumas con la marca y marca un nuevo capítulo en el legado de Ford en la carrera hacia las alturas.
