Toyota del Perú consolida su liderazgo en el mercado automotriz peruano durante el primer semestre del 2025. La marca registró 17,713 unidades vendidas entre enero y junio, alcanzando una participación de mercado del 20%. Este resultado responde a una estrategia enfocada en la electrificación de su portafolio, la expansión de su red de concesionarios y el fortalecimiento de su cadena de valor para ofrecer una experiencia de movilidad más eficiente y accesible.
En el segmento de pick-ups, que representa el 19% del mercado, Toyota lidera con una participación del 39%, impulsada por la emblemática Hilux, modelo que se mantiene como referencia por su robustez y confiabilidad. En el segmento de SUV, que ya concentra el 46% del mercado, la marca destaca con los modelos Rush y Corolla Cross, logrando una participación del 18% y consolidando su presencia en una de las categorías de mayor crecimiento en Perú.
Otro hito relevante es el avance de los vehículos electrificados. Durante el semestre, Toyota vendió 1,694 unidades híbridas autorecargables (HEV), lo que representa un incremento del 70% respecto al mismo periodo del año anterior. Modelos como el Corolla Cross HEV y la RAV4 HEV continúan siendo referentes en la transición hacia una movilidad más sostenible, sin necesidad de infraestructura de carga adicional.
La marca también ha fortalecido su presencia en todo el país con la expansión de su red de concesionarios. Durante estos primeros seis meses del año, se han inaugurado nuevos puntos de venta en Huaraz, Tarapoto y Puno, acercando la propuesta de Toyota a más clientes y facilitando el acceso a soluciones de movilidad en distintas regiones del Perú.
En cuanto a servicio postventa, Toyota del Perú ha reforzado su cadena de valor al incorporar una garantía de hasta 10 años o 200,000 kilómetros, la más amplia del mercado peruano. Esta iniciativa reafirma la confianza de la marca en la durabilidad de sus productos y ofrece mayor tranquilidad a sus clientes durante toda la vida útil del vehículo.
Finalmente, destaca el aumento en la preferencia por la transmisión automática, que pasó de representar el 19% a 25% del total de ventas de la marca, superando la tendencia general del mercado. Este crecimiento refleja una mayor demanda por confort y facilidad de manejo, alineándose con las nuevas necesidades de los conductores peruanos.